(Re)viviendo el patrimonio
La semana pasada les conté que tuve una cita y seguro que, como dicen los españoles, vienen por el cotilleo. Hay mucho que contar, pero solo diré que las citas han seguido. Una de ellas fue ayer.
Hola queridas y queridos, qué emoción poder saludarles.
La semana pasada les conté que tuve una cita y seguro que, como dicen los españoles, vienen por el cotilleo. Hay mucho que contar, pero solo diré que las citas han seguido. Una de ellas fue ayer y tuvo que ver con conocer el patrimonio tan valioso que tiene esta ciudad. ¿Por qué? Porque este fin de semana es el Día de los Patrimonios en Chile.
Si están en alguna región de Chilito, espero que hayan visitado al menos un espacio cultural. Si no viven aquí, anótense esta fecha y háganla coincidir con su viaje a este delgadito país. ¿En qué consiste esta fecha? Es una actividad organizada por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio donde miles de espacios patrimoniales abren sus puertas gratis por todo un fin de semana para que podamos ir a conocerlos.
Comenzó hace 25 años y yo nunca había participado porque estaba de turno en el diario o era la pandemia o me daba flojera, pero ayer me animaron a recorrer y fui feliz. Ahora, no es un día para todo el mundo. Hay que tener paciencia, mentalizarse para las filas, priorizar solo un par de lugares o dividir la ruta en todo el fin de semana. Si no se toma esa precaución puede ser un poco frustrante porque es difícil visitar muchos sitios en un solo día.
Nosotros hicimos una modesta lista de lugares y muchos algunos espacios tienen mucha fila (hice hasta tres horas de cola), las calles tienen una energía muy linda: hay mucha gente por donde mires, compartiendo, emocionados, hay música en la calle, el comercio abre hasta más tarde y el centro se revitaliza. Sí a todo.
Lo que más me gustó es que la ciudad sale de su estado habitual, se desordena, y la gente se relaja y se entrega a vivir los espacios. De repente te habla gente desconocida a preguntarte para qué sitio estás haciendo fila, o conoces a algún amigo de tu amigo que se sumó a la ruta que organizaron o vas caminando por la Alameda y ves un escenario frente a La Moneda con un concierto de cumbia y las parejas se detienen a bailar. Ellos, en particular, me hicieron sonreír porque todos merecemos ser así de felices en la calle.
Una lectura para recomendar: Una amiga me escribió esta semana para pedirme recomendaciones literarias. Leyó Atrás queda la tierra, de mi querida Arianna De Sousa-García, y me dijo que quería seguir con no ficción. Le mencioné varios de los libros que ya he recomendado en este boletín, pero me quedé pensando. ¿Qué lecturas he disfrutado? Recordé El rastro en los huesos.
Esta historia de la admirada Leila Guerriero es sobre el Equipo Argentino de Antropología Forense, que nació para identificar a víctimas de la última dictadura militar de ese país.
Fue una de las lecturas que nos envió para leer previo a sus clases, cuando hice el Magíster en Periodismo Escrito. Después de leerla, dije: “Qué ganas de observar como mira esta mujer”.
Una frase que me emociona: Qué fastidio Taylor Swift, dijo nadie que lea este newsletter. Una de mis canciones favoritas de su nuevo álbum es “Who’s Afraid of Little Old Me”.
You wouldn't last an hour in the asylum where they raised me
So all you kids can sneak into my house with all the cobwebs
I'm always drunk on my own tears, isn't that what they all said?
That I'll sue you if you step on my lawn
That I'm fearsome and I'm wretched
and I'm wrong
Putting narcotics into all of my songs
And that's why you're still singing along
Who’s Afraid of Little Old Me - Taylor Swift
Un lugar para volver: Ayer conocí el Palacio de la Alhambra y fue mi patrimonio preferido. La fila fue agotadora, estuvimos más de tres horas y varias veces pensamos en tirar la toalla, pero valió la pena cada minuto y el dolor de pies. Es un palacio con estilo neo-árabe inspirado en su homónimo de Granada, España. Aunque está un poco deteriorado (es un espacio autogestionado pero ojalá tuviera financiamiento y mayor inversión), lo más sorprendente fue saber que el centro de Santiago esconde esta joya tan única. Lo recomiendo mucho.
Palacio de la Alhambra Un link: Si les gusta leer a mujeres y conocer autoras latinoamericanas, hoy les recomiendo el próximo club de lectura en el que me voy a inscribir: Latina por suerte, de mi querida June García. ¿Cómo funciona? Ella lo explica en sencillo: “Leeremos dos libros al mes (nos juntamos cada dos semanas), de dos autoras del mismo territorio: uno de una viva y uno de una muerta. Ahora nos toca pasar por Argentina con Gabriela Cabezón Cámara y Hebe Uhart; por Venezuela con Arianna de Sousa-García e Ida Gramcko; y terminaremos en Bolivia con Liliana Colanzi y María Virginia Estenssoro”🌸.
Hará una versión presencial (a ese iré yo, así que si están en Santiago aprovechamos de vemos), y otra online para los que viven en otras regiones de Chile o el mundo.
Las inscripciones cierran luego, así que anímense y comiencen a leer.
Una canción para el domingo: Hoy partí a escribir este boletín con “Ain’t no sunshine”. Siento que la voz de Bill Withers es un cuerpo que se mueve con cada letra de esta canción. La disfruto mucho y me hace sentir que cada palabra está cargada de emociones💙.
Ya saben, vivan con ganas y quieran a los suyos.
Nos leemos pronto, pásenla bien y cuéntenme en los comentarios qué les pareció este texto.
Saludos,
Manuel